domingo, 22 de abril de 2007

Compras alternativas

Uno puede ir a Corea y volver con la maleta llena de potes de cerámica, máscaras de madera, algún preparado con ginseng, una camiseta del Hard Rock Café,… o bien puede volver con algún producto de los que usan realmente los coreanos.

Las falsificaciones de ropa deportiva de marca abundan en el metro. Por unos 4 euros puedes llevarte camisetas bastante aceptables. Buscando en las tiendas de ropa del metro, también pueden hallarse falsificaciones de marcas como Chanel o Dior. En Dongdaemun pueden encontrarse deportivas falsificadas y, como os comenté, en Itaewon, relojes, bolsos,… Siguiendo con productos ilegales, en el metro también abundan los vendedores de DVD piratas (tres por unos 8 euros). De hecho (alucinante), en el súper de al lado de casa también venden DVD pirata (y no es ésta precisamente una zona marginal de la ciudad).

En el metro, abundan los vendedores ambulantes que van de vagón en vagón y sus demostraciones suelen ser muy divertidas. Así, te tratan de colocar peonzas luminosas poniendo varias en funcionamiento a la vez en medio del vagón; te enseñan que el cierre para bricks que te quieren endilgar funciona dándole la vuelta a bricks llenos de agua; otros, empiezan a abrir paraguas allí en medio –para riesgo de más de un ojo-,…

Tampoco está mal el que vende una compilación de mp3, haciendo una especie de exposición a lo José Manuel Parada de las canciones que marcaron “nuestras” vidas (no pone coplas, pero sí Only You y demás pastelones de los 50 –la modernidad del disco acaba en ABBA-). Pero mi favorita es, sin duda, la máquina para cortar pepinos, cuyo proceso de venta tiene como clímax el momento cuando la mujer –lo siento, esto sólo lo venden mujeres- se empieza a pegar las rodajas por la cara y empieza a pegar brincos mirando al suelo por todo el vagón, para demostrar que no se caen),…

Sin embargo, si queréis comprar algo más selecto y a la vez todavía poco conocido en España, también tenéis donde elegir. Desde móviles con TV incorporada (un montón de personas van viendo la TV en el metro) a los archifamosas tapas de vater con chorrito, modo masaje,… También podríais llevaros algún tipo de pastillas antienvejecimiento, que aquí tienen un gran mercado. Pastillas de cartílago de tiburón, jalea real,… Y bueno, para las más presumidas (y que no tengáis que parir –ay qué dolor-), en el periódico anuncian una silla reductora de cadera digna de Tomás de Torquemada. Su funcionamiento consiste en una especie de “U” de plástico en el que la mujer sienta sus posaderas y, a continuación, empiezas a ajustártelo como si de la cabeza de una llave inglesa se tratara (vamos, que te debe dejar el culo como si lo metieras en la trituradora de basura de la primera peli de Star Wars). Debe de ser horrible para la salud… pero la moda manda, y aquí las curvas no se llevan… ¿Alguna se anima?

Por cierto, al final no fui el sábado a cenar al restaurante español (voy esta noche) pero, a cambio, vi que vendían en la calle lo más asqueroso que me he encontrado hasta el momento en cuestión de comidas: pondegui, o lo que es lo mismo, larvas hervidas de gusanos de seda. Se ve que las sacan de los capullos y -¡cómo no1- son muy buenas “para los hombres”… pero vamos, muy desesperado hay que estar para comerse las larvillas con sus patitas encogidas…

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Traeme lo que quieras menos gusanillos. Hasta el estrecha culos pero de gusanillos nada.Gracias Ma

Anónimo dijo...

Traeme aunque sea crema de baba de caracol.Hasta pastillas de cartílago de tiburón para mi menisco pero de larvillas nada. Thanx Ja

Anónimo dijo...

Alvarito nis e te ocurra traer larvas, no las necesito, como mucho ginseng, pero ya sabes que me caí en la marmita de ginseng, cuando era peke, como obelix.

ciao

Álvaro dijo...

Ja: Si pones la TV temprano por la mañana, podrás comprar "Felton", la crema con baba de caracol:-p
Alb: Menos lobos, que el cabrón de Newton lo clavó...
La verdad es que con tanta oposición a las larvillas, me estáis provocando para que os lleve un paquetillo (las venden secas aquí al lado, en el mercado de Namdaemun)...